viernes, 4 de noviembre de 2016

El día D

El día D:
D de diagnostico.
Fatídico día.

Oh si, todo empieza durante este día. Posiblemente lo sospechabas desde hace algún tiempo, había ciertos indicios: aquel yogur (todos) que "estaba caducado", esa leche del pueblo que te sentaba taaan mal "porque no tenía todos los mejunjes que le echan ahora",  aquellas cenas en el italiano en las que te ponías hasta el culo de queso pero simplemente "algo te había caído mal al estomago...", ya sabes ¡minucias!

Pero no, no es hasta el "día D" cuando empiezas a ser ligeramente consciente del asunto.
La verdad que nosecuantos años después lo ves en retrospectiva,  y sí que ya sabes porque te dolía el alma y te quedabas dormido/a en cualquier esquina pero ese día es....¿PORQUÉ A MI MUNDO CRUEL?¿Es una venganza del ganado bovino? ¡¡¡Ag!!! (y no Ag de Oro *da boom tss* chiste).

Existen varias formas de diagnosticar la intolerancia a la lactosa, pero las más comunes, son dos:
a) "Test de intolerancia a la lactosa", muy original si... que mide el nivel de glicemia en sangre: si una hora después de la administración de cierta cantidad (conocida) de lactosa, el nivel de glicemia no sube (<20mL/g) eres intolerante je-je.

b) "Test respiratorio de H/Hidrógeno", en este caso se da lactosa por vía oral y se va midiendo el nivel de Hidrógeno en el aliento cada cierto periodo de tiempo desde que ingieres la lactosa: a mayor cantidad de hidrógeno, menor es tu absorción de la lactosa, por lo que si la cantidad de H supera cierto umbral... je-je también. Esta es la prueba más normal, y de la que se hablará a partir de aquí.

EL DÍA PRE-D:
Tanto si la prueba de test respiratorio te la hacen por la seguridad social como en un laboratorio privado, el proceso es similar: el día anterior a la prueba piensas ponerte hasta arriba de cualquier cosa con un ¡PELIGRO LACTOSA! por los "por si acaso", pero no... claro que no, sería demasiado bonito. Toca seguir una maravillosa dieta en la que da igual lo que te apetezca (como buena dieta) que no podrás ni olerlo durante las 12 horas previas a la prueba. Por supuesto, beber tampoco. Al fin y al cabo es una prueba <<médica>> y no deja de ser un paso rutinario, pero necesario.

DÍA D: 
LA PRUEBA FINAL (leer en tono dramático)
Con suerte te tocará madrugar (vas en ayunas a por el diagnóstico menos malo posible, madrugar es el menor de tus males ahora mismo) con la esperanza de acabar con aquello rapidito, !ains iluso/a¡
Tras los tramites necesarios (Hola, soy Juanita blablabla) y el correspondiente interrogatorio (¿Ha seguido usted la dieta?¿Se ha lavado los dientes?¿....?), en el que créeme que si mientes, lo sabrán y te tocará volver otro día para que te hagan la prueba... Llega el momento:

CHAN CHAN CHAAAAAAAAN

Para ti: un vaso de plástico lleno de un líquido viscoso (y lo siento pero para nada sabroso), y a bebértelo ¡Que aproveche! Jejeje...
A partir de ahí te hacen ir a soplar en un aparato similar al que usan para las espirometrías cada x tiempo. Normalmente estas ahí, soplando en "el test de alcoholemía" durante unas 2 horas hasta que te dan las buenas nuevas. Curiosamente el tiempo que tardas en hacer la digestión ¿eh? En el peor de los casos, solo serán 6 horitas, total, la mañana ya la habías perdido, no te tengañes.

           > Si tu nivel de H no aumenta dentro de los límites establecidos, lo siento... no eres intolerante, no molas (es broma, pero molas menos).
           > Si eres intolerante, como ahora ya sabes, (y sino lo vas a saber), tus intestinos no podrán asimilar la lactosa, y esta de algún modo mágico (próximamente) pasará del colón a tu aliento, liberándose al final en forma de H. Por tanto, a más H en el test, menor y peor absorción!!!*

Bieeeen!!!! YOU ARE WELCOME!
Aquí empieza la aventura amiguis

Efectivamente, eres intolerante y tu cabeza empezará (o no) a generar ese sentimiento de culpabilidad cada vez que te acerques a una vaca, porque ahora sabes que realmente la maldi...lactosa es lo que te dejaba hech@ unos zorros.
¡Pero joder, que vas a empezar a sentirte bien! 
Por no hablar de lo bonita que va a estar tu nevera llena de productos de etiqueta morada juajuajuajuaaa :P



viernes, 25 de marzo de 2016

¿Tú también?

¿Acabas de descubrir que perteneces a ese cerca del 75% de la población mundial con intolerancia a la lactosa? ¿No tienes ni idea de por donde empezar? ¿Quieres llorar? Si todavía no has entrado a cualquier web del tema y estas un poco perdidx, aquí tienes la guía rápida para sobrevivir y explicar a tus conocidos porque ya no podrás tomar casi cualquier cosa que te ofrezcan: 

- ¿Qué es la lactosa?: podría poner la versión larga y compleja de es un Disacárido formado por la unión de una molécula de glucosa y otra de galactita, blablablabla
pero eso ya te lo ha dicho wikipedia (y si no, no sé a que estas esperando, oh, ser intolerante!).
Basicamente esta mala pécora es el "azúcar de la leche", y lo vas a encontrar en multitud de alimentos  camuflado como aroma, conservante, estabilizante... pero no te desmoralices, tiene su lado positivo: te convertirás en un/a experto/a analizad@r de etiquetas.

- ¿Por qué no puedo tolerarla?: ¡No seas cruel!, solo no puedes digerirla... tu intestino delgado no genera suficiente lactasa, si... lac-taaaaa-sa: enzima que se encarga de "romper" las moléculas de lactosa y hacerla "digerible"; sin lactaaaasa entonces, el aparato digestivo (concretamente el intestino grueso) no puede absorber lactosa. Algo así como pedirle a tu estómago que disuelva la comida sin haberla masticado.


Fuente: el nutricionista de la general
Fuente: el nutricionista de la general
Este deficit en la producción de lactasa, puede ser de origen genético (incurable) o temporal (ocasionado por daños intestinales etc.); si es de origen genético, se da de manera progresiva (oh, vaya, envejecemos y encima tenemos que dejar de comer cosas...) o estar ahí desde que nacemos,
(¡Echa un ojo a los tipos de intolerancia a la lactosa, próximamente).


- ¿Y si sigo tomando lactosa?: Bueno, si a ti te gusta ir por ahí dejando "tu aroma", tener que visitar el wc cada vez que comes y vivir cansad@... Toma toda la lactosa que gustes, mi parte te la cedo, fíjate; las malas lenguas dicen que puede pasarte cualquier cosa relacionada con la mucosa de los intestinos, desde diarrea (si, lo he escrito) hasta posible cáncer (eso dijo mi doctora, lo juro). Seguir como hasta ahora, o renunciar a ciertas cosas para mejorar tu calidad de vida es tu decisión.
Pero no seas pesimista, cada vez existen más alternativas para poder llevar una dieta sin lactosa,  y sin renunciar del todo a los lácteos,  la "leche sin" solo sabe un pelín más dulce que la "normal".

- ¿Y ahora? ¿Qué hago con mi vida?:
¡¡¡VIVIRLA!!! Al principio te va a costar (en todos los sentidos), habrá un montón de cosa que antes podías y ahora no puedes, y eso hasta que te acostumbras (si, lo acabas haciendo) puede hacerse un pelín cuesta arriba.
Tienes por delante un largo camino de adaptación y aprendizaje: descifrar etiquetas, explicar a tu abuela por que no puedes comerte ese arroz con "leche con", esquivar todos los telepizzas, pizzahut, domino's y similares; pedir la lista de alérgenos allá donde vayas (oh, y dominar tu ira cuando no te la quieran enseñar claro), agudizar tus ojos a envases morados y símbolos de Lactose Free; aprender a cocinar tu propia "comida" por fin... Y sobre todo a ahorrar, por supuesto de la necesidad los genios del marketing hacen negocio y por cada "sin" que compres te vaciarán más que hasta ahora los bolsillos a no ser que seas tan o más astuto y hábil en la cocina. 
Pero al final, tu cuerpo y tus intestinos te lo van a agradecer tremendamente, ya verás.

Eso sí, espero que no seas fan de la leche de camello.
¡¡Animo!! You're welcome!!


PD: pásate por la web de (ADILAC), la Asociación De Intolerantes a la Lactosa España para más y mejor info, especialmente por el semáforo alimentario, perfecto para saber que no debes ni oler.